lunes, 28 de abril de 2008

libre

¿Es posible que no me sienta libre?
¿Es tan difícil decir lo que uno siente o piensa?
¿Qué nos ata?
¿Por qué hay miedo a decir las palabras con todo su contenido?
Mayo del 68. Mayo del 2008. 40 años y ¿somos más libres?
¿soy más libre?
Entre amigos, entre hermanos, entre compañeros, entre la gente...
Ser libre,
libre para decirle a la cara lo que uno piensa, con educación, pero con claridad.
Ser libre,
libre para vestir como uno quiera.
Ser libre,
libre para tener amigos de aquí y de allá.
¿soy libre?
Qué bonita la palabra LIBERTAD.
Y qué hueca de contenido, no?
A mí me parece.
Si dices lo que piensas, eres poco diplomática.
Te buscas enemigos, y como digo yo, mis damnificados...
Que estoy harta,
harta, hartita
de tanta
hipocresía barata,
de tanta baratija.
Mercadillo de todo a cien, de todo a un euro.
Libre, que quiero ser libre.
Volar, con los pies en la tierra y el alma en el aire.
Libre.-

EL CLIMA DE BURGOS

Según su humor, Burgos nos protege y cobija o nos empuja y nos saca a patadas a la calle.
Óscar Esquivias. La ciudad de plata.

Esta frase ya la escribí el otro día, pero me da vueltas a la cabeza porque me siento tan identificada...
Hace unos años conocí a una malagueña (salerosa, por cierto) que vino a Burgos por motivos de trabajo, estuvo aquí unos tres años.
Me decía cómo la sorprendía ver la ciudad y sus calles cuando hacía bueno.
Yo le decía, que en Burgos el día que hace bueno hay que salir, hay que aprovechar. Se nos crea una especie de estado ansioso, no puedes desaprovecharlo, no puedes desperdiciarlo quedándote en casa. Tienes que salir.
Y este fin de semana ha sido increíble. El centro estaba repleto de gente.
Como sigo con Camille, hemos estado por el centro pateando la ciudad. Fuimos por "mi" río paseando hasta Fuentes Blancas.
Y como suelo decir, parece que se habían roto las tuberías de gente y todos salíamos de casa como si ésta se nos fuera a caer encima.

Por contra, hay días de crudo invierno, aquellos en que a las cinco y media ya es casi de noche, que a las nueve ya no sé ve a un alma por la calle, que parece una ciudad muerta. Esos días son muchos, y los que vivimos en Burgos desde hace años lo sabemos.
Ah, y uno no se puede fiar de esa luz y ese cielo azul brillante, porque como salga el norte, ¡muérete! Desde casa parece una maravilla, pero sales a la calle y esque ese viento te corta hasta la respiración.
Muchos hemos estado en los toros con calcetines y botas, y hasta con plumífero.
Hay noches, incluso de verano, que como se levante el norte...hace un frío que pela.
Esque Burgos es así, como decía una frase: "Burgos no te dejará frío", y un amigo añadía "Te dejará helado".