viernes, 30 de noviembre de 2007

MOSCOSO


MOSCOSO
Que estoy de moscoso.
Que lo digo bajito por si hay algún duendecillo envidiosillo suelto por ahí.
Que me voy a la peluquería.
Asunto propio.
Asunto particular.
Qué ricos me saben (estos días).
Que me voy al mercadillo.
Que me voy a beber de la fuente de la calle, de las calles, de la gente.
Que me voy a pasear.
Que luego no me cunde nada.
Que me voy a alguna tienda.
Que estamos a treinta y se acaba noviembre
Que viene diciembre pisando fuerte.
Y sigo buscando el punto intermedio, ¿a ver si me estoy volviendo demasiado prosaica?

jueves, 29 de noviembre de 2007

JORNADA DE PUERTAS ABIERTAS




PUERTAS ABIERTAS en la cárcel de Burgos.

Qué curioso.

¡Ah!, pero son sólo para entrar, no para salir.
Bueno, si para entrar están siempre abiertas, ¿o no?
¡Ah!, pero son sólo para periodistas, no para cualquiera.
Para entrar, pero para el que TENGA que entrar.
Que si yo quiero entrar no puedo, no soy periodista, no estoy acreditada.


Bueno, sí puedo, pero no quiero, no debo.
Pero si quiero, entro, mira que entro, ¿eh?
Jornadas de puertas abiertas, señores,
Pasen y vean.
Entren, entren.




Ya se sabe, esto de las Puertas Abiertas está de moda.


Antes, cuando decidías entrar, visitar o ir a cualquier lugar era con todas las de la ley (nunca mejor dicho). Cuando ibas, ibas, te arriesgabas, nunca antes lo habías visto porque nada te lo proporcionaba, tal vez alguien te lo contaba, a lo mejor tenías la suerte de tener alguna foto que alguien guardaba o leías algo en alguna enciclopedia, pero tampoco te planteabas la anticipación.


Yo, por ejemplo, creo que cuando fui al colegio, no lo ví hasta el primer día, creo recordar, claro que tampoco lo recuerdo.

Ahora no, ahora puedes pasarte varios días de tu vida excursioneando por diferentes lugares como si de ver exposiciones se tratase.

Se elegían las cosas, probablemente, con menos argumentos. Pero ahora, todo está previsto, todo está calculado, todo se conoce y se ve antes de ser visto.
En este caso, prefiero sólo visitarlo virtualmente, lagarto-lagarto.


P.D. Necesitaba volverme un poco prosaica, más que nada para seguir estando (o buscando) en este punto intermedio.

miércoles, 28 de noviembre de 2007

LAS FUENTES. MIS FUENTES. ESAS FUENTES

MIS FUENTES
Las fuentes, mis fuentes….

De las que he bebido,
en las que he vivido.
A las que hoy agradezco y reconozco.

Que me saciaron la sed,
que me dieron la luz y la claridad,
que me dieron el tiempo de pensar,
que me atraparon en su transparencia cristalina.

Las fuentes, mis fuentes…
con las que me atraganté
con las que me refresqué
en las que me ahogué
a las que arrojé (¿?)
de las que imaginé.

Las fuentes, mis fuentes…
esas pequeñas cascadas,
esa fuerza de vida,
esa vida contenida,
ese frescor,
esa prisa por salir sin saber a dónde,
ese lugar de deseos y ensoñaciones,
ese lugar de picias y tentaciones …

Las fuentes, mis fuentes….

martes, 27 de noviembre de 2007

EL PARÉNTESIS

Cuando me despoje (despojé) de todas las etiquetas que me he colgado (colgué)....
Cuando me quite (quité) esta dichosa venda: sucia y vieja...
Cuando mire (miré) a los ojos...
Cuando huela (olí) tu verdadero perfume...
Cuando estornude (estornudé) de prejuicios mi pañuelo…
Cuando te toque (toqué) con mis manos pequeñitas…
Cuando te escuche (escuché) sin ruidos ni interrupciones…
Cuando te sienta (sentí) a mi lado de verdad…
Cuando me ponga (puse) en tu lugar….
Cuando saboree (saboreé) tu esencia…

Ese día...
En ese preciso momento...
En ese instante seré (fui) libre de mi, de mi pasado, de mis años, de mi educación…

Si ese paréntesis se abre, entonces no habrá sido, sólo eso, un paréntesis, un instante..

lunes, 26 de noviembre de 2007

ESTE PUNTO INTERMEDIO

Porque siempre me veo en medio
Porque tengo cuarenta y ojalá viva otros cuarenta
Porque me gustó el paso del Ecuador
Porque siempre me quedo con el centro
Porque no me siento ni en la derecha ni en la izquierda
Porque (casi) me gusta el negro,
Porque (casi) me gusta el blanco,
Porque sobre todo me gusta el gris
Porque me repliego y me doy
Porque me gusta la soledad y la sociedad
Porque me va la marcha y me va la tranquilidad
Porque me gusta el rock y me gusta música lenta
Porque te quiero y te odio, a la vez
Porque soy niña y soy mujer
Porque me gusta estar en medio del ajo
Porque me gusta ser perejil de todas las salsas
Porque me pongo en el lado del bueno y del malo
Porque no todo está bien o está mal
Porque no estoy ni arriba ni abajo
Porque a veces me siento jamón de sándwich
Porque me gustaría encontrar una respuesta diferente al sí o al no
A veces, apenas, casi, tal vez,…

Llegado a este punto intermedio: los cuarenta.

Mirar hacia atrás, y mirar hacia delante
y a la vez quedarme con este momento, con este día, con esta mañana, y con este instante en el que estoy escribiendo.

El momento de lucidez, de ternura, de sinvergüenza, de libertad, de todavía juventud, de tantas cosas…


Creí que, apenas, ya nada me iba a sorprender,
(¡Qué tonta!)
Creí que ya me lo sabía casi todo,
(¡Qué ignorante!)
Creí que ya podía emocionarme por poco,
(¡Qué inmadurez!)
Creí que ya me había cansado de pensar, de meditar…
(¡Qué ingenua!)
Creí que ya me había hecho mayor
(¡Qué inocente!)


Y sin embargo,
Averigüé, percibí, sentí, viví, y seguí conociendo a gente, seguí amando, seguí sonriendo.

¿Alguien me dijo, que a partir de esta “segunda juventud” ya uno lo tenía todo hecho?
Ya tenía trabajo
ya tenía mis amigos
ya tenía mis aficiones
ya tenía mi familia
ya tenía un (mi) marido
ya tenía mi dinerito…

¿Ya estaba todo hecho?

Y, “me cagüen diez”
Que me quiero seguir emocionando
Que quiero redescubrirme
Que quiero vivir
Que quiero enamorarme
Que quiero crecer, conocer y querer