lunes, 14 de abril de 2008

la maternidad

Fui madre por primera vez a los 28 años.
Me supuso un cambio total en mi vida.
No sé si estaba preparada o no.
Lo pasé fatal los primeros meses.
No sé cuánto tiempo necesité para adaptarme.
Me sentí completamente atada.
----------------
Recuerdo cuando llegué a casa a los tres días de parir, eran como las cuatro de la tarde de una tarde de primeros de agosto, calurosa y silenciosa.
Coloqué a mi niña en un moisés que había preparado, en el que habían dormido muchos bebés de la familia previamente, y me tumbé en la cama a echarme la siesta. Cuando me desperté y vi allí a esos apenas tres kilos de personita que estaban esperando a succionar de mí para sobrevivir..., me sentí fatal. Es difícil de describir.
Una sensación de responsabilidad, de dependencia, de no saber qué sentir, de un amor intenso pero sin desarrollar, de alguien tan extraño y tan nuevo...que me daban ganas de huir.

Yo siempre había deseado tener hijos, disfruté el embarazo y lo viví a tope.
Creo que es una experiencia única, pero tampoco necesaria.
Parí de forma natural, por elección y decisión propia.
Y el parto fue algo hermoso y doloroso. Mi marido participó del momento y fue algo muy íntimo y especial.
-------
Tenía mucha ilusión por tener hijos.
No sé si era el instinto maternal o qué.
Había pasado por la experiencia de un aborto natural y lo pasé mal, y diferentes perrerías de esas por las que pasamos algunas mujeres.
Mis hijos han sido buscados y queridos.
Y a pesar de ellos, todavía me sigo preguntando por el sentido de la supervivencia, por la ilusión de traer hijos al mundo. A veces sigo sin entenderlo.
----------
Hoy he pensado en esta entrada, he pensado en la maternidad de la nueva ministra.
Siento pensar que me parece incompatible.
Empezar un cargo de ministra y estar a punto de dar luz.
Probablemente decir esto es políticamente incorrecto.
Siento que el hecho de ser madre nos condiciona de una manera que profesionalmente es difícil de compatibilizar, al menos el primer año de vida de nuestro hijo. Sí hay cuidadores, hay guarderías, hay abuelos...pero sigo pensando que al menos el primer año el hijo con quien mejor está es con su madre.
A pesar de la conciliación familiar creo difícil la compatibilidad en un puesto de tanta responsabilidad y en pleno embarazo y plena crianza.
También reconozco que el hecho de estar en casa es muy cómodo para las parejas que se van a trabajar fuera y llegan y lo tienen todo "hecho". De acuerdo. Pero además el hecho de estar con tu hijo el primer año es una recompensa que no se paga con el mejor trabajo del mundo. Y, yo, no soy nada madraza, que conste.
Sigo pensando que llevar a un hijo nueve meses dentro te crea un estado especial, que necesitas estar con ese hijo y él contigo. Que no hay padre, siento pensar esto pero es lo que pienso, que lo sustituya.
No podemos las mujeres negar la evidencia de que parir es femenino, criar es cosa nuestra y esto es algo tan puramente físico y natural que es imposible hacerlo compatible con ciertas cosas.

Nota: al final de escribir esto me quedo con la sensación de que me hubiera gustado hablar de este tema porque siento que me podría haber explicado mucho mejor.