Os contesto a vuestros comentarios.
No dudo de que tengáis razón unos y otros.
Me figuro que yo con mi carácter y lo deslenguada que soy no sé que me hubiera pasado en una dictadura. Estando en una democracia a veces esto me ha dado problemas (pequeños).
Pero, tal vez me refería a esa libertad para decirle a un amigo, a tu compañero, a tu marido, a tu madre...en ciertos momentos lo que piensas sobre algo de ellos, y como lo acepten...es cierto que ahí entrará también la persona. A veces hay que nadar en un río de hipocresía y de mentiras estúpidas, que al menos a mí me hacen sentir menos libre.
Pero la conclusión que saco después de leeros a todos es que os sentís libres, me alegro por vosotros, yo a veces no.
Algunos decís la libertad interior, por supuesto, y la exterior gracias a Dios, la tenemos.
O tal vez es que a veces quisiera "escapar" de este mundo y me veo en cierta manera esclava. ¿Me explico?
Sigo pensando que quiero andar y caminar con los pies en el suelo y el alma a mi aire.
Un abrazo y un beso de libertad para todos vosotros.
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8 comentarios:
En esta sociedad del consumo somos esclavos del trabajo, del banco, de la televisión, del fútbol, de las vacaciones, de la moda, de ....
¡Qué bonito lo que dices, querida Pilar! Es cierto, no has vivido una dictadura, has nacido en un país libre pero sin embargo te sientes esclava. Te entiendo. A mi me pasa igual. Ahora somos esclavos de la maldita globalización que nos ata y agobia. Sinceramente, yo echo de menos los años finales del franquismo donde verdaderamente respirabas y vivias LIBERTAD; especialmente en Ibiza y por supuesto si no estabas involucrada en temas políticos, como fue mi caso.
Ya sabes que a mí siempre podrás decirme lo que piensas.
Yo, por ejemplo, desde aquí le voy a decir a Bipolar que hace mucho que no sé de ella y que el lunes pasé a saludarla y no estaba.
Hola locuela, por supuesto que eres libre, tan libre como quieras, todas las ataduras que normalmente tenemos todos son absolutamente materiales (dinerín, poder...) y afectivas (respetos humanos) desembarzarse de todo eso es un problemón tremendo ¿eh?, en lo que hay que tener más cuidado es en hablar abiertamente de lo que uno piensa de los demás, las probabilidades de equivocarse son tan grandes y la posibilidad de herir tan enormes que es mejor callar... pero es también tan, tan difícil. Saludos bibliotecarios.
Ya te hemos enlazado, no te escapas... XD
Hola, jovencita. Pues sigo diciendo que eres libre, y que llevas contigo la libertad. Insisto en que si te expresas como te expresas es que eres libre. Un saludo con afecto
Nadie puede ir diciendo a los demás lo que piensa sobre ellos realmente. Nos quedaríamos solos.
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